Capitalismo.

En cada caso existe una referencia en el origen etimológico de la palabra "capitalismo" a la idea de capital, y estas referencias son correspondientes: quienes crean o adquieren capital permanecen como sus propietarios (capitalistas) durante el proceso de producción, la rentabilidad del capital invertido en un libre mercado de productos y servicios es el eje central de la vida económica.
Definiciones afines:
El régimen económico en el cual la titularidad de los medios de producción es privada, entendiéndose por esto su construcción sobre un régimen de bienes de capital industrial basado en la propiedad privada.
La estructura económica en la cual los medios de producción operan principalmente en función del beneficio y en la que los intereses directivos se racionalizan empresarialmente en función de la inversión de capital y hacia la consecuente competencia por los mercados de consumo y trabajo asalariado.
El orden económico en el cual predomina el capital sobre el trabajo como elemento de producción y creación de riqueza, sea que dicho fenómeno se considere como causa o como consecuencia del control sobre los medios de producción por parte de quienes poseen el primer factor.
El sistema económico en el cual las relaciones sociales de producción y el origen de la cadena de mando –incluyendo la empresaria por delegación se establece desde la titularidad privada y exclusiva de los accionistas de una empresa en función de la participación en su creación en tanto primeros propietarios del capital. La propiedad y el usufructo queda así en manos de quienes adquirieron o crearon el capital volviendo interés su óptima utilización, cuidado y acumulación, con independencia de que la aplicación productiva del capital se genere mediante un trabajo colectivo y conjunto, material e inmaterial, por cada uno de los actores de la misma empresa.
Estas teorías fueron puestas encima de la mesa y fueron utilizas por los gobiernos y por la burguesía fundamentalmente a fin de mejorar en las condiciones de vida, en estos tiempos, de unos pocos, frente a la inmensa mayoría del resto que eran los menos pudientes.
Estos grandes y considerados como l os economistas clásicos, los más representativos fueron: Adam Smith, David Ricardo, Robert Malhtus, David Ricardo y Malhtus eran alumnos de Adam Smith y a la vez eran amigos, por este motivo, sus teoría eran muy parecidas, Ricardo tuvo un alumno bastante aventajado, Carlos Marx.

Aspectos culturales de la Revolución Industrial.


El monasterio y la disciplina
Mumford explica que durante los primeros siete siglos de la existencia de la máquina, las categorías de tiempo y espacio sufrieron un cambio extraordinario y que todos los aspectos de la vida fueron afectados por esa modificación.
La aplicación de los métodos cuantitativos del pensamiento tuvo su primera manifestación en la medición regular del tiempo. La nueva concepción mecánica del tiempo surgió en el monasterio medieval. Fue allí donde el deseo de orden y poder se manifestó primariamente.
 Dentro del monasterio regía el asilo. Bajo la regla del orden y la disciplina quedaron eliminadas la sorpresa, la duda, la arbitrariedad y la irregularidad.
 En el sigo VII, el Papa Sabiniano regularizó el sonido de las campanas que sonaban siete veces al día para indicar al pueblo las "horas canónicas".
De esta manera, los monasterios contribuyeron a dar a la vida el ritmo y la regularidad de la máquina.
Posteriormente, los campanarios se propagaron fuera del monasterio y las horas dadas por las campanas sometieron al trabajador y al mercader a la regularidad.
El reloj y el ritmo en la ciudad
El reloj mecánico hizo su aparición hacia el siglo XIII cuando traspasó las murallas del monasterio y las ciudades exigieron una vida ordenada.
El reloj fue la máquina clave de la época industrial moderna. Marcó la perfección hacia la que aspiraban otras máquinas.
Disoció el tiempo de los acontecimientos humanos y contribuyó a fomentar la creencia en un mundo independiente, de secuencias mensurables: el mundo de la ciencia.
Hacia fines del siglo XVI apareció el reloj doméstico y fueron las clases pudientes las que primero adoptaron y luego popularizaron el nuevo mecanismo.
Llegar a ser tan regular como un reloj era el ideal burgués.
La popularización del hecho de tener presente la hora, que surgió con el reloj barato estandarizado a mediados del siglo XIX, era esencial para un sistema bien articulado de transporte y producción.
Por lo tanto, el tiempo asumió el carácter de un espacio circunscripto que podía ser llenado, dividido, medido y dilatado.
La perspectiva y los nuevos mapas
Durante la Edad Media las relaciones espaciales mostraban cierta tendencia a ser organizadas en relación a los símbolos y valores de la Cristiandad. Lo más importante era la aguja de la Iglesia que apuntaba al cielo y dominaba los demás edificios.
El espacio y el tiempo medievales formaban dos sistemas relativamente independientes. Esta característica se veía representada en las obras de arte donde el artista introducía otros tiempos dentro de su propio mundo espacial, tales como escenas de la vida de Cristo dentro de una ciudad contemporánea italiana.
Dado que el espacio y el tiempo se encontraban separados, el eslabón que unía los sucesos era el orden cósmico y religioso.
Entre el siglo XIV y XVII en Europa occidental se dio un cambio revolucionario en cuanto a la concepción del espacio. De ser una jerarquía de valores se transformó en un sistema de magnitudes. Comenzaron a estudiarse las relaciones de los objetos en el espacio y las leyes de la perspectiva.
Lo que los pintores hicieron en sus cuadros al aplicar la perspectiva, los cartógrafos lo aplicaron en los nuevos mapas. Se establecieron las líneas de latitud y longitud con lo que se abrió el camino para los exploradores posteriores.
El descubrimiento de la naturaleza
Las categorías de tiempo y espacio se unieron y se coordinaron con el movimiento, con lo cual se los pudo medir y controlar.
El interés por el mundo celestial fue suplantado por el interés en el mundo material. Este cambio de visión hacia la naturaleza se manifestó primero en figuras solitarias antes de ser generalizada.
El descubrimiento de la naturaleza fue el acontecimiento más importante de la era de descubrimientos del mundo occidental. Los viajes, los estudios y tratados sobre la naturaleza daban cuenta del cambio de actitud hacia el mundo exterior para explorarlo, invadirlo, conquistarlo y comprenderlo.
Cambios socio-culturales
Antes de que los inventores crearan máquinas, los hombres se habían disciplinado y organizado.
La mecanización de los hábitos humanos preparó el camino para llevar a cabo imitaciones mecánicas.
La nueva burguesía redujo la vida a una rutina minuciosa e ininterrumpida en lo referente a los negocios, a las comidas o a los placeres. Todo era cuidadosamente medido y metódico. Todo quedó sujeto al calendario o al reloj.
El protestantismo reforzó las ideas de sobriedad de la clase media. Unió las finanzas al concepto de una vida fundada en Dios. Convirtió al ascetismo apoyado por la religión en un procedimiento para concentrarse en los bienes y en el progreso terrenal.
De esta manera, Mumford concluye que la mecánica se convirtió en la nueva religión y dio al mundo su nuevo Mesías: la máquina.

Aspectos sociales de la Revolución Industrial.


La industrialización que se originó en Inglaterra y luego se extendió por toda Europa no sólo tuvo un gran impacto económico, sino que además generó enormes transformaciones sociales.
Proletariado urbano.
Como consecuencia de la revolución agrícola y demográfica, se produjo un éxodo masivo de campesinos hacia las ciudades; el antiguo agricultor se convirtió en obrero industrial. La ciudad industrial aumentó su población como consecuencia del crecimiento natural de sus habitantes y por el arribo de este nuevo contingente humano. La carencia de habitaciones fue el primer problema que sufrió esta población marginada socialmente; debía vivir en espacios reducidos sin comodidades mínimas y carentes de higiene. A ello se sumaban jornadas de trabajo, que llegaban a más de catorce horas diarias, en las que participaban hombres, mujeres y niños con salarios miserables, y carentes de protección legal frente a la arbitrariedad de los dueños de las fábricas o centros de producción. Este conjunto de males que afectaba al proletariado urbano se llamó la Cuestión social, haciendo alusión a las insuficiencias materiales y espirituales que les afectaban.
Burguesía industrial.
Como contraste al proletariado industrial, se fortaleció el poder económico y social de los grandes empresarios, afianzando de este modo el sistema económico capitalista, caracterizado por la propiedad privada de los medios de producción y la regulación de los precios por el mercado, de acuerdo con la oferta y la demanda. En este escenario, la burguesía desplaza definitivamente a la aristocracia terrateniente y su situación de privilegio social se basó fundamentalmente en la fortuna y no en el origen o la sangre. Avalados por una doctrina que defendía la libertad económica, los empresarios obtenían grandes riquezas, no sólo vendiendo y compitiendo, sino que además pagando bajos salarios por la fuerza de trabajo aportada por los obreros.

Las propuestas para solucionar el problema social.
Frente a la situación de pobreza y precariedad de los obreros, surgieron críticas y fórmulas para tratar de darles solución; por ejemplo, los socialistas utópicos, que aspiraban a crear una sociedad ideal, justa y libre de todo tipo de problemas sociales (para algunos, el comunismo). Otra propuesta fue el socialismo científico de Karl Marx, que proponía la revolución proletaria y la abolición de la propiedad privada (marxismo); también la Iglesia católica, a través del Papa León XIII, dio a conocer la Encíclica Rerum Novarum (1891), primera Encíclica social de la historia, la cual condenaba los abusos y exigía a los estados la obligación de proteger a lo más débiles. A continuación, un fragmento de dicha encíclica:
« (...) Si el obrero presta a otros sus fuerzas a su industria, las presta con el fin de alcanzar lo necesario para vivir y sustentarse y por todo esto con el trabajo que de su parte pone, adquiere el derecho verdadero y perfecto, no solo para exigir un salario, sino para hacer de este el uso que quisiere (...) »
Estos elementos fueron decisivos para el surgimiento de los movimientos reivindicativos de los derechos de los trabajadores. Durante el siglo XX en medio de los procesos de democratización, el movimiento obrero lograba que se reconocieran los derechos de los trabajadores y su integración a la participación social. Otros ejemplos de tendencias que buscaron soluciones fueron los nacionalismos, así como también los fascismos en los cuales se consideraban a los obreros y trabajadores como una parte fundamental en el desarrollo productivo de la nación, por lo que debían ser protegidos por el Estado. No en vano el Estado de Bienestar es una idea de Hindenburg que fue potenciada por Hitler para obtener el apoyo de su clase trabajadora.

Aspectos políticos de la Revolución Industrial.


Política en el transcurso de la revolución: En cuanto a la política la forma del estado durante el Antiguo Régimen es la Monarquía Absoluta.
-El rey considera que su poder es de origen divino (Dios ha delegado en él) y por tanto, ilimitado (sólo responden ante Dios).
-Los monarcas absolutos concentran en sus manos el poder legislativo, el ejecutivo y el judicial, mandan sobre el ejército y todas las instituciones del estado.
-El estado en su conjunto (incluyendo sus habitantes-súbditos) no son sino una propiedad personal del Rey.
Política después de la revolución: Con la Revolución Industrial terminó por desaparecer en Inglaterra el régimen absolutista, este dio paso a una monarquía más liberal y sustentada en las bases de una Monarquía constitucional. Gracias a la escasa injerencia que comenzó a tener la Corona en la economía, la nueva burguesía industrial comenzó a tomar papeles importantes en el aspecto político.

Aspectos económicos de la Revolución Industrial.


A este principio también aplica al comercio internacional. El comercio internacional se liberaliza, sobre todo tras el Tratado de Utrecht (1713), que liberaliza las relaciones comerciales de Inglaterra, y otros países europeos, con la América española. Se termina con las compañías privilegiadas y con el proteccionismo económico; y se aboga por una política imperialista y la eliminación de los privilegios gremiales. Además, se desamortizan las tierras eclesiásticas, señoriales y comunales, para poner en el mercado nuevas tierras y crear un nuevo concepto de propiedad.

El gran auge y desarrollo del transporte, propicio la posibilidad de que todo tuviera un gran éxito, no podría haberse hecho efectivo el traslado de lo producido en la fabricas a los diferentes mercados si no llega a ser por este hecho importante, además, como cuestión de mejora en lo mercantil, se crean los grandes mercados nacionales e internacionales, en los que las mercancías pueden viajar libremente por el país sin necesidad de pagar aduanas
A mediados del siglo XVIII, la industria británica tenía sólidas bases y con una doble expansión: las industrias de bienes de producción y de bienes de consumo. Incluso se estimuló el crecimiento de l a minería del carbón y de la siderurgia con la construcción del ferrocarril.
Así, en Gran Bretaña se desarrolló de pleno el capitalismo industrial, lo que explica su supremacía industrial hasta 1870 aproximadamente, como también financiera y comercial desde mediados de siglo XVIII hasta la Primera Guerra Mundial (1914). En el resto de Europa y en otras regiones como América del Norte o Japón, la industrialización fue muy posterior y siguió pautas diferentes a la británica.

¿Que es la Revolución Industrial?

La Revolución Industrial es el cambio en la producción y consumo de bienes por la utilización de instrumentos hábiles, cuyo movimiento exige la aplicación de la energía de la naturaleza. Hasta finales del siglo XVIII el hombre sólo había utilizado herramientas, instrumentos inertes cuya eficacia depende por completo de la fuerza y la habilidad del sujeto que los maneja. El motor aparece cuando se consigue transformar la energía de la naturaleza en movimiento. La unión de un instrumento hábil y un motor señala la aparición de la máquina, el agente que ha causado el mayor cambio en las condiciones de vida de la humanidad.